Esta mascarilla es ideal para recuperar los nutrientes que se van perdieron con el paso del tiempo. Aquí te dejamos la receta para cada tipo de piel.
Ingredientes
2 cucharadas cafeteras de harina de almendra
1 medida pequeña de agua purificada (piel grasa), leche (normal) o crema (seca)
Elaboración:
En un recipiente pequeño mezclen la harina con el líquido que se adapte a su tipo de piel, revuelvan hasta formar una pasta, déjenla reposar por un minuto y ¡listo!
Ahora extiéndala sobre la cara y el cuello, consiéntanse con un masaje y enjuaguen.
Hazla a diario y usa crema hidratante al final.