La ciencia sugiere que algunas especies de aves tienen vidas sociales casi tan complejas como las nuestras y para eso se necesitan habilidades mentales muy sofisticadas.
Las aves también manipulan, traicionan, engañan, discuten, hacen trampas, se burlan, roban a sus vecinas, rivalizan por el estatus social, advierten a sus crías que se alejen de los desconocidos, juegan, entre muchas otras cosas.
Otra cosa muy curiosa es que los pájaros también se aman, se besan para consolarse mutuamente. El ave arrendajo europeo es capaz de anticipar los deseos de su pareja, por ejemplo, la comida que va a preferir y trata de complacerla por amor.
Otro sentimiento que tienen los pájaros es la tristeza, ellos llegan a deprimirse pues si muere su pareja dejan de comer por tristeza. Y tienen sus duelos: cuando muere un arrendajo, sus allegados se juntan alrededor del cadáver, aletean y hacen ruido, luego se van y no vuelven a ese lugar durante tiempo. Cómo un funeral.
Otro comportamiento curioso es que cuando tú alimentas a un ave, él te lo agradece con un regalo, dejándote en el lugar en el que les pusiste la comida unas frambuesas o cualquier cosa que brille o un pequeño objeto humano.
También esta comprobado que las aves cantan también por placer y hay evidencia de que cuando les sale bien tienen una subida de endorfinas. Y las parejas hacen dúos cantando, cuando se aman lo que exige mucha coordinación.