- Intenta motivarte tú misma. La motivación podría no surgir en el primer momento, pero si te propones unas pequeñas tareas, quizás te sientas mejor. Imagina lo bien que te sentirías si vas al cine con tus amistades o si sales a caminar al parque.
- Romper el ciclo de la negatividad. Este podría ser otra razón por la cual te sientes sin ganas de hacer nada, porque estás nadando, de manera inconsciente en un mar de negatividad. Intenta romper ese ciclo, cambia tus rutinas y plantéate un objetivo que llene tu vida de ilusión.
- Practica algún ejercicio físico. Tal vez suene ilógico, pero una vez que comiences a ejercitar tu cuerpo, experimentarás bienestar y tu estado de ánimo cambiaría.
- Dedícate a eso que te gusta. Pues, quizá, tus tareas son aburridas y eso es lo que te ocurre. Pero si retomas tu pasión por la fotografía, la pintura, aprender algún idioma, o te integras a un curso, podría retomar el ánimo en tu vida.
- Toma un pequeño viaje. Y con ello lograrías desconectarte de la cotidianidad y la rutina. Unos días con la mente relajada podrían ser la solución.
- Plantéate un reto. Proponte conocer nuevas personas, asistir a más eventos culturales, o vivir una experiencia que nunca antes hayas hecho.
- Coloca una fecha en el calendario. Así te sentirás comprometida a la realización de tu nueva meta.
- Evita aislarte. Para que los pensamientos tóxicos y el pesimismo no se apoderen de ti. Disfruta tiempo de calidad con las personas que quieres y que están cerca de ti.
- La felicidad depende de ti. Recuerda que tu felicidad no depende de otras personas, sino de ti misma. En ti están todos los recursos para sentirte feliz.
Por último…
Si ya lo has intentado todo por ti misma, y sientes que aun así no logras salir de ese estado de desinterés o apatía, es importante y necesario que busques ayuda profesional.
Si tú sientes que no cuentas con la suficiente fuerza para hacer tus tareas, regresar a tu trabajo o incorporarte a tus estudios, entonces visita a un psicólogo.
No te quedes esperando que simplemente la sensación se vaya sola, ni permitas que esto se apodere de ti. Es probable que estés padeciendo abulia como síntoma principal de una depresión mayor, o que tu estado sea el de una imposibilidad de sentir alegría o placer por las cosas, es decir, una anhedonia.
No te preocupes, cualquiera que sea tu situación, si ya lo intentaste todo, busca apoyo terapéutico y todo estará bien.
Fuente: Mejor con Salud