Estos son los tips aliados, recomendados por La Romántica 92.9:
Platos bien pensados
La regla de oro es privilegiar los alimentos y preparaciones a base de elementos frescos y sin cocción. Aportarán una gran cantidad de sustancias que ayuden a la digestión y mejorar el metabolismo, y que se pierden durante la cocción de los alimentos.
Hay que tener en cuenta que en un grupo siempre están quienes quieren cuidarse y presentarles comidas adecuadas es muy alentador.
Algunas opciones posibles
Entradas y platos principales
– Ensaladas gourmet con vegetales frescos y diferentes aliños.
– Brochettes de vegetales frescos y mezcla de frutas.
– Patés de frutos secos (pueden ser de semillas de girasol, con distintos sabores), hummus de diferentes vegetales o guacamole.
– Escabeche de vegetales con oliva, brotes y germinados.
Postres
– Ensaladas con frutas frescas.
– Brochettes de frutas y chocolate.
– Helados raw hechos solo con frutas frescas como palta, banana y otras opciones de estación.
Además, antes de la reunión, conviene anticiparse e implementar algunas estrategias. Una de ellas es comer algún alimento fresco -puede ser una ensalada, un jugo exprimido o una fruta. Esto no hará, por sí mismo, que desaparezcan las ganas de comer. Pero, como además de emociones somos un sistema biológico, un alimento natural brindará mayor armonía y energía y prepará el cuerpo para una excelente digestión.
Cambiá el foco
Una buena recomendación para implementar durante una reunión es recordar que “la comida no es tu problema y que el cuerpo tampoco lo es”. También es bueno relajarse y tratar de estabilizar las emociones antes de sentarse a la mesa. Las respiraciones conscientes son un buen método para lograrlo.
El paso a paso para una técnica efectiva
- Tomá una postura suelta y relajada, preferentemente sentada y con los ojos cerrados.
– Pensá en el estado que deseás conseguir, en cómo quieres en verdad sentirte, para agregar una intención a la respiración.
– Exhalá por la boca todo el aire que tengas dentro de tu cuerpo. Inhalá el aire nuevo lentamente y por la nariz. Retenelo unos segundos y soltalo nuevamente por la boca, de forma suave y serenamente.
Disfrutá
La preocupación extrema por “cuidarse” puede llevar a perderse buenos momentos y mucha energía. Por eso, lo mejor es mantener la calma y ¡vivir el momento! Una vez que ya estás en la fiesta, disfrutala. Con amor y amabilidad hacia vos misma, tomá el control de lo que te hace bien.
Fuente: Clarín