Aunque siempre nos pintan que lidiar con las suegras es casi tema para hacer una película de terror, no tiene que ser así. Presta atención a estos consejos para llevarte bien con ella:
No trates de competir.
Así como no es bueno intentar compararte con la ex, tampoco es válido hacerlo con la madre. Definitivamente la relación que hay entre tu pareja y su progenitora es muy diferente a la que tiene contigo. Las comparaciones son absurdas y solo crean situaciones incomodas para tu pareja que, en caso de encontrarse en una encrucijada, opte por irse del lado de quien le dio la vida y no del tuyo.
No hables mal de ella.
Criticar y cuestionar la manera en que tu suegra hace las cosas no es una opción válida si quieres llevarte bien con ella. De igual modo, evita hablar mal de ella con tu pareja, pues esto crea tensión y conflicto entre todas las partes, tanto así que podría terminar con tu relación amorosa.
Sé atenta/o
No se trata de comprar su afecto hacia ti, sino más bien de ser detallista, cosa que vale más de lo que te puedes imaginar. Si, por ejemplo, te toca visitarla, no está de más que le lleves un pequeño detalle como un postre o una bebida.
Halágala.
Dentro de los defectos que todos tenemos siempre hay aspectos positivos que se pueden resaltar. En caso de que se le dé bien la cocina, puedes hacer un cumplido sobre lo bien que sabe su comida (aunque ojo, tampoco es que la vas a halagar con la intención de que siempre sea quien cocine en las reuniones).
Muéstrate a disposición.
Gestos como ofrecerte para lavar los trastes cuando te invita comer a su casa o mostrarte a disposición de llevarla a algún lugar cuando tu pareja no puede, hará que tu suegra vea tu lado colaborador, lo cual de seguro sea una cualidad que le agrade para la novia o esposa de su hijo.
FUENTE: diariolibre.com
EDICIÓN: Uriel Pérez