Te explicamos en siete pasos cómo no fomentar el machismo en tu familia y cuáles son los beneficios para los integrantes.
1. Modela [pon el ejemplo] de igualdad en casa
Realicen el cuidado de los hijos y el trabajo del hogar como socios verdaderos. Dividan las tareas domésticas y el cuidado de los hijos de forma igualitaria y hablen abiertamente sobre cómo y porqué comparten las responsabilidades.
2. Mamás, olvídense de la perfección
Libérate de la presión por ser perfecta y de la culpa por no pasar tanto tiempo con tus hijos(as). Asume una aproximación colaborativa para educar a tus hijos y evita meterte en todos los detalles. Los niños se benefician cuando ambos padres están activos e involucrados.
3. Papás, sean padres activos e involucrados
Sé un papá activo. Ayuda a tus hijos con las tareas, léeles cuentos y libros y platícales de tus experiencias diarias y tus sueños. No tienes que ser perfecto, debes involucrarte.
4. Oponte y desafía los estereotipos de género
Asegúrate de que tus hijos e hijas jueguen con varios tipos de juguetes que les permitan desarrollar un amplio rango de habilidades cognitivas y sociales. Pon atención y sé precavida(o) con lo que tus hijos leen y ven y habla abiertamente sobre los mensajes que transmiten los medios.
5. Elimina la brecha salarial desde que son niños o jóvenes dependientes de sus padres y hacen tareas domésticas
Dale a tus hijos tareas domésticas equivalentes, reconócelos y págales igualmente. Si tu hijo y tu hija se turnan para poner la mesa y sacar la basura, crecerán sabiendo que las mujeres y los hombres pueden, y deben, dividir el trabajo y el ingreso de forma equivalente.
6. Ayuda a tus hijas a dirigir, conducir o liderar. Fomenta su autonomía económica
Ayuda a tu hija a ponerse metas y a dividirlas en pasos pequeños y alcanzables. Aliéntalas y estimúlalas a salir de su zona de comodidad [confort] para que construyan confianza e inscríbela en deportes y en otras actividades organizadas.
7. No le digas a tu hijo que “sea hombre” o “no seas nena”
Enséñale a tu hijo a valorar la inteligencia y la reflexión por encima de la rudeza. Aliéntalo a respetar sus propios sentimientos y a tener empatía por los demás.
Fuente: bbmundo