¿Cuál es el origen de las calaveritas literarias del día de muertos?

Las calaveras son un tipo de poema que funciona como una especie de epitafio cómico. Las calaveras literarias suelen burlarse de la gente como si ya estuvieran muertos o como si la Muerte ya fuera a venir por ellos y normalmente se escriben en la víspera del Día de Muertos.

Las calaveras literarias surgieron durante la época del virreinato en la Nueva España. Diversas fuentes mencionan a Fray Joaquín Bolaños como el autor de la calaverita más antigua de México, La portentosa vida de la Muerte”, un largo texto donde el escritor afirma: “Desabrida es la muerte más para que no te sea tan amarga su memoria, te la presento dorada o disfrazada con un retazo de chiste… Va en forma de historia porque quiero divertirte”. Dicha obra fue publicada en 1992 por El Colegio Nacional.

Cabe mencionar que las calaveras literarias eran, por lo general, una crítica social dedicada a algún miembro del estado, como señala el sitio Calaveras Literarias y agrega que “es una composición humorística y, estrictamente hablando, de corte satírico, porque se ridiculiza todo aquello que por lo general es respetado; siendo la ironía el elemento de donde proviene lo cómico”.

Aunque las calaveras literarias fueron reprimidas desde sus inicios, eso no impidió que florecieran en el México independiente y se hicieran populares entre la población. En el siglo XIX, el famoso grabador José Guadalupe Posada les dio un giro a las calaveritas con sus ilustraciones y es precisamente gracias a él que hoy contamos con la icónica “Catrina” aquella calavera elegantemente vestida que porta un sombrero de pluma.

Artículos

Artículos Relacionados