Si tienes los labios excesivamente secos, te recomiendo utilizar aceite para conseguir crear una capa oleosa con la que los labios recuperen algo de la elasticidad que han perdido al resecarse. Aplica un poco de aceite de oliva o de coco sobre tus labios realizando pequeños círculos. Deja reposar durante la noche, y al día siguiente, comprueba cómo han mejorado tus labios.
Si tienes los labios levemente secos, opta por una exfoliación que elimine las pieles muertas. Solamente necesitarás un poco de miel y azúcar, y si quieres hidratar mientras exfolias, opta por aplicar un poco de aceite en la mezcla. Masajea tus labios hasta que veas que quedan lisos.