Para tener una buena calidad de sueño no es suficiente con dormir, sino que hay que hacerlo bien para que el este sea reparador y uno se pueda levantar descansado y con energía.
La actividad física realizada durante el día, los horarios, las comidas, lo que se ha bebido, lo que se hace antes de acostarse, los medicamentos que se toman, la edad, los problemas, todos son factores que afectan el sueño.
Es por eso que hoy te traemos estos sencillos consejos que podrás seguir para tener un mejor descanso y por ende, mejor rendimiento durante el día.
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Cómo tener una mejor calidad de sueño
Actividad física diaria: es bueno realizar algún tipo de actividad física durante el día, pues favorece el descanso durante la noche. Lo mejor es realizarlo al levantarse o al caer el día, antes de cenar.
Alimentación: las cenas deben ser ligeras y realizarse al menos una hora antes de acostarse. Platos sencillos, evitando los guisos, las comidas especiadas o grasas y las frituras.
Horarios: hay que procurar acostarse y levantarse todos los días a la misma hora, incluso los festivos, teniendo en cuenta el tiempo de descanso que cada uno necesita para levantarse despejado y con ganas de afrontar el trabajo.
Siestas: las siestas son buenas, pero siempre que no excedan de los 20-30 minutos. De este modo no se ve afectada la calidad del sueño nocturno. Bastan cinco minutos de sueño sentado en un sillón para que uno despierte despejado y activo.
Condiciones ambientales: el organismo produce una hormona, la melatonina, que induce el sueño. Pero esto sólo sucede si no hay ningún tipo de luz en la habitación. Por ello hay que apagar la luz en el momento en que uno se acuesta.
Solo usa la cama para dormir: ni para leer, ni ver la televisión, ni trabajar con el ordenador. La cama sólo se debe utilizar para dormir.
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Por: Redacción
Editora: Diana Vázquez