Zero Waste: una tendencia ecológica

Con tanto desperdicio, el mundo ya necesitaba una tendencia como el Zero Waste para ayudar al medio ambiente.

Según datos de Naciones Unidas, cada año generamos cerca de 11.200 millones de toneladas de residuos en el mundo.

Este volumen tan elevado de residuos provoca que su gestión cada vez sea más compleja y que gran parte de ellos tengan un impacto negativo en la naturaleza: contaminación del agua y el suelo, emisión de gases contaminantes derivados de la desintegración de la basura, etc.

Estos últimos suponen un 5% en las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero, uno de los principales causantes del calentamiento global.

Zero Waste: así es posible vivir sin generar residuos

Por eso hoy te hablamos del Zero Waste para que nuestra realidad pueda cambiar y nuestro mundo pueda mejorar.

¿Qué es Zero Waste?

Residuo Cero’ es la traducción al español del conocido movimiento internacional ‘Zero Waste’. Este concepto engloba las actuaciones encaminadas a la reducción y reutilización de objetos y productos presentes en nuestra vida cotidiana para evitar que acaben impactando negativamente en la naturaleza.

Este movimiento se basa en una regla conocida como las cinco erres:

  • Rechazar todo aquello que no necesitamos.
  • Reducir lo que necesitamos: consumo más responsable.
  • Reutilizar y dar una segunda vida a los productos y materiales.
  • Reciclar: esta opción es solo una alternativa para cuando no podemos ni reducir ni reutilizar.
  • Rot (o compostaje): Es el proceso de descomposición natural de los residuos orgánicos. Esto puede servir como nutriente para, por ejemplo, cultivos. Se trata de un abono limpio y respetuoso con el medio ambiente.

¿Por qué es importante?

La reducción de residuos debe ser una prioridad. Y es que, según el Programa de Medio Ambiente de Naciones Unidas (PNUMA), una persona es capaz de generar de media cerca de 480 kilos de basura al año. Unas cifras que necesitamos reducir cuánto antes.

Por esto, movimientos como ‘Zero Waste’ son fundamentales para avanzar en un modelo de producción y consumo basado en la economía circular y el desarrollo sostenible.

Aunque hay muchos países en donde este estilo de vida ya es una normatividad, aún queda mucho por hacer para reducir los niveles de basura del mundo. ¡Ház tu parte!

Por redacción

Editora: Ditza Flores Castillo

Artículos

Artículos Relacionados