Curar un ‘corazón roto’ podría sonar como una frase de películas, pero más gente de la que piensas ha pasado por algo similar.
Febrero y sus celebraciones no son placenteras para todos, ya que nuestras historias de amor son tan diferentes como las formas de superar los malos ratos.
Todos hemos sentido que nos han ‘roto el corazón’, metafóricamente, claro. Sin embargo, la preocupación y el dolor proveniente de esas experiencias es tan real como cualquier otra aflicción física.
Cuando nos encontramos en esa situación de querer ‘curar un corazón roto‘ nos podríamos encontrar con muchas dudas, y por ello hoy te compartiremos algunos consejos que podrían ayudarte a mejorar.
Aceptación
El primer paso para avanzar de una situación complicada es aceptar lo ocurrido, aceptar los sentimientos adversos y aceptar que necesitas efectuar un cambio.
Una vez que aceptamos nuestro estado actual, podemos comenzar a sanar.
Sanar el autoconcepto
El amor enriquece nuestro crecimiento, nos hace ver la vida de manera diferente pero también cambia la perspectiva de nosotros mismos.
Por eso un ‘corazón roto’ supone un golpe directo a nuestro autoconcepto.
La mejor manera de que ese autoconcepto se recupere después del dolor es fomentar el amor propio.
Puedes intentar pequeñas rutinas como ejercicio, planes diferentes, dedicar tiempo para ti y hasta mejorar la salud como parte de este proceso.
Mantente ocupado
Para curar un ‘corazón roto’ es importante centrar tu atención a otras cosas que el dolor.
No hay mejor medicina que mantenerse ocupado, haciendo cosas productivas y que nos gusten como forma de terapia.
Eso nos ayuda a fomentar sentimientos de autosuficiencia e independencia.
Conoce a gente nueva
Conectar con gente nueva te abre la mente a nuevas oportunidades.
Además las experiencias de otras personas te puede llenar de ideas innovadoras que al final pueden convertirse en buenos consejos para seguir creciendo.
A veces se necesita ayuda para curar un corazón roto
Buscar consejo de tu familia, amigos o incluso de un profesional nunca será una mala idea.
Recuerda que lo importante es reconocer que sanar es tu responsabilidad y que nadie prestará más atención a eso que tú.
Si bien curar un ‘corazón roto’ tomará tiempo, vale la pena dedicarnos a estar bien con nosotros mismos, porque eso tendrá un efecto positivo inmediato en muchos más aspectos de nuestra vida, y no sólo en lo romántico.