Es importante aprender a manejar nuestras emociones, pero sobre todo el enojo que muchas veces nos lleva a hacer cosas de las cuales después nos podemos arrepentir, como gritarle a nuestros seres queridos o mandar todo a volar.
1. Toma un tiempo
Si estás enojado/a con una persona lo ideal es aclararlo. No puedes dejar el enojo así nada más, porque se crean más dificultades. Evita los pensamientos que aumenten el coraje en ti y haz alguna actividad que te mantenga distraído.
2. Acepta lo que no puedes cambiar
Cuando no tenemos el control sobre esas situaciones lo mejor es aceptarlas y reconocer que así son, no quiere decir que te estás dando por vencido. Pero lo mejor que se puede hacer es alejarse de la situación, cambiar nuestra actitud y forma de pensar.
3. Haz un diario
- 1 siendo nada y 10 mucho, ¿cómo calificarían los demás tu enojo?
- ¿Cómo lo calificarías tú?
- ¿Qué sucedió antes?
- ¿Qué piensas de lo que está pasando o de la persona que ocasionó el enojo?
4. ¡Relájate!
Respira profundo, repite palabras tranquilizadoras como “relájate”, “tómalo con calma”, y repítelas cuando respiras.